¡Hola amigoneja/o! Dado que lo que más nos preocupa cuando vivimos con un conejo -o varios- es su salud, he decidido empezar a desgranar la anatomía para conocer mejor cómo es y qué le puede pasar. En esta primera entrega vamos a hablar de la boca y dientes del conejo. ¡Allá vamos!
¿Cómo es la boca de un conejo?
Ay, esa boquita tan linda que tienen, ¿eh? Nos encanta verles la boca tan pequeñita, ¡pero anda que no guarda secretos! Por ejemplo, los labios están separados (se llaman labios leporinos), así que nos encontramos el labio izquierdo y el labio derecho superior independientes. Verás que cuando se lamen lo hacen en los dos lados, ¡son tan graciosos!
Seguramente te pase como a mí, que hace un tiempo pensaba que los conejos sólo tienen los dientecitos que se le ven. ¡Pues no! Tienen muchos más de lo que aparenta…Mira, mira…
Tienen 6 pareces de incisivos (paletas), ¡seis! Las que has visto seguro (si le retiras hacia atrás los labios podrás vérselas fácilmente) que son las dos paletas de arriba y las dos de abajo. Pero ojo, que justo detrás del par superior tienen otro par más.
Piensa que los incisivos encajan uno delante del otro, si las muelas están muy altas, los incisivos crecerán más hasta que puedan encajar uno delante del otro. En el espacio que queda entre los dos pares de incisivos es donde se corta la comida y con la lengua se empuja hacia atrás para masticarla en las muelas. Es por eso que parece que la mandíbula les baile hacia los lados y parezcan tan graciosos.
Además tienen muelas, aunque son difíciles de ver. En realidad tienen 10 premolares (3 pares arriba y 2 pares abajo) y 12 molares (3 pares arriba y 3 pares abajo). En total son 28 dientes los que tienen en esa boca diminuta.
¿Por qué es tan importante la boca?
La boca, al albergar los dientes, se convierte en uno de los templos de la salud del conejo. El otro, bajo mi punto de vista es el sistema digestivo. Pero volviendo a los dientes…ya sabes que nunca paran de crecer y que el secreto de que estén sanos es que los desgasten: a través de la buena alimentación y de juguetes, si se da el caso.
Por supuesto, la salud dental de los peludines es básica. ¿Cómo se puede ver afectada su salud?
- La maloclusión de los dientes es un problema importante, ya que necesitará de cirugía en la mayoría de casos. ¿Qué es la maloclusión? Pues justamente que la mandíbula no encaja bien, ya sea porque los dientes crecen torcidos, porque no se desgastan lo suficiente (producto quizá de una mala alimentación) o porque hay «puntas» en las muelas. Imagina que tienes un pico de un diente que se te clava en la encía o la lengua, ¿qué dolor, no? Seguro que no tendrías ganas de comer, amigoneji, así que seguramente tu conejito tampoco.
¿Cómo se soluciona una maloclusión? Con un limado de dientes o en el peor de los casos, según la gravedad, la extracción de la pieza que corresponda. Obviamente, un veterinario de exóticos te facilitará mucha más información y más precisa sobre este tema y seguramente alternativas. Recuerda que si tu conejo tiene algún síntoma de dolor, debes acudir inmediatamente al veterinario.
- Infección en los dientes. Puede que a través de una bacteria se le infecte la raíz del diente, por ejemplo. Los síntomas de infección pueden ser desde que se le inflame un ojo, babee, presente pus o un bulto en la mandíbula (absceso) y por supuesto que deje de comer. En este caso el tratamiento pasará por quitar la infección a través de antibióticos, drenando y, en muchas ocasiones, solucionando la base del problema extrayendo el diente.
- Algún tipo de traumatismo. Si se dan un golpe y se ven afectados los dientes, tendrás que acudir al veterinario para que te indiquen cómo actuar.
- Por otra parte, tal y como nos dijo la veterinaria en nuestra última revisión, es normal que los conejos tengan cierta desviación en las muelas. Igual que nosotros los humanos no tenemos siempre los dientes perfectos, ellos tampoco. Por eso se convierte en imprescindible las revisiones, para controlar que aunque puedan haber pequeñas imperfecciones, éstas no se compliquen y no afecten a la mordida. Así que la genética aquí también marca una diferencia.
Ten en cuenta que un buen veterinario de exóticos siempre examinará en el chequeo anual sus muelas. Es muy importante que lo haga ya que del buen estado de éstas depende en gran parte la salud de tu peludín.
¿Cómo hacemos para que todo esté bien?
Una buena dieta basada en el heno (acuérdate que sólo el heno es lo que hace que desgaste los dientes). Si el conejo tiene problemas en las muelas a pesar de alimentarse correctamente (¡claro que puede pasar!), algunos veterinarios también recomiendan darles para morder algunos «juguetes» que les cueste más morder, tales como corteza de sauce o palos de algún arbol que sea óptimo.
Curiosidades:
Dado que tienen los ojos a los lados de la cara y su vista no es frontal, tienen un punto ciego justo entre su nariz y la barbilla. Por eso tienen bigotitos y los labios sensibles, así pueden encontrar bien la comida.
Si algún día tienes que darle medicina a tu peludín, seguro que se la darás por la parte de la diastema. Y tú dirás, «¿pero bueno, Rocío y eso qué es?» Pues es la parte que hay entre los incisivos y los premolares. En ese área no hay ningún diente con lo cual facilita mucho cuando tenemos que hacerles tomar la medicina o la papilla a través de una jeringuilla, por ejemplo.
Conclusión
Como siempre te digo, la mejor herramienta para controlar la salud de tu peludín es que lo observes y lo conozcas bien. Observa si:
- Baja de peso
- Deja de comer
- Cuando le tocas le notas algún bulto inusual por la zona de la cabeza
- Lagrimea en exceso
- Babea
- Está más apático
Por supuesto, acude a tu veterinario de exóticos de confianza y poneos en marcha para solucionarlo lo antes posible.
Espero que nunca te pase nada de ésto, pero ojalá te haya servido esta información para estar más al día de esta parte tan vital en la anatomía de los conejos. Si quieres compartir tu experiencia déjame un comentario más abajo o en Facebook, Twitter o Instagram. Y como siempre, ¡comparte si te ha gustado! ¡Hasta la próxima semana!